Cavorite y yo estábamos en mi casa esperando a que mis papás terminaran de alistarse para irnos todos a una reunión. Mi casa no se parecía en nada a mi casa. En la espera comíamos nachos con queso y guacamole y veíamos una película de corte Bridget Jones o Love, Actually, que empezaba como un documental preguntando cómo llegábamos los seres humanos a sentir amor y cómo se manifestaba este sentimiento. Luego mostraba a una señora embarazada a la que del peso del bebé se le rompía el piso bajo la cama y caía sobre otra cama, y luego sobre otra y luego sobre otra. A medida que iba cayendo iba acumulando niños de los pisos de más abajo que iban cayendo en el hueco y cuyo peso contribuía a la siguiente caída. Esto mientras justo debajo, en el primer piso, una banda tocaba una canción que empezaba con “wake up, wake up”. Se la estaban tocando a ella a modo de serenata por solicitud del marido. Este despertar abrupto con caídas ocasionaba que la mujer tuviera que salir corriendo al hospital a dar a luz.
2010 -
09.24