Mi hermana y yo compartíamos un espacio para vivir en un mundo distópico donde nos filmaban y observaban. De repente aparecía j. Como mi hermana estaba afuera, lo conducía a la cama que ella y yo compartíamos y ahí nos acostábamos y nos mirábamos pero no nos atrevíamos a mucho más. Máximo llegábamos a abrazarnos. Cuando mi hermana llegaba, nos encontraba abrazados. Yo lo llevaba a un sofá en la parte más alejada del espacio. El espacio no era encerrado, sino que era como un segundo piso en un hall muy grande, con barandas en vez de paredes. Había una sola pared entre la cama y el sofá, más o menos, y yo quería llevarme a j. allí pero había más gente observando. No sé por qué nos observaban. Mi hermana me decía que hiciera lo que quisiera (o sea, que podía volver a la cama) pero que tuviera en cuenta que él estaba muy desaliñado. Finalmente j. y yo tratábamos de escapar pero nos disparaban desde las montañas. Quedé confundida al despertar porque j. y yo ya no hablamos en la vida real pero esto se sintió como un encuentro real con un sentimiento que quedó enterrado hace años.
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