Ayudaba a alguien a buscar sal en un supermercado japonés. Me angustiaba pensar que no sabía cuándo podría volver a estar allí. Por accidente escogía un paquete de mezcla para tempura y un japonés le señalaba mi error a la otra persona. Seguíamos buscando, yo un poco afanada, y en la sección de mariscos y carnes encontrábamos que estaban filmando una película. Una rubia crespa le decía al actor horroroso que hace de Arthur en el remake que era una serpiente fantasía sexual. El actor tenía unos calzoncillos horribles, una versión aguamarina de los de Sean Connery en Zardoz. Alrededor había patas de cangrejo gigantes. De repente ya no estaba en el almacén sino en un cuarto, creo, y un amigo mexicano me pedía ayuda. Yo lo aconsejaba. Creo que varias personas íbamos a salir a la calle. Entonces me llegaba un mensaje de j. diciendo que, en parte por celos, iba a contestarme una pregunta en Formspring. El asunto iba a que debía dejar de darme tanto palo.
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