Nota al margen

Cuando estaba en primero de primaria mi profesora de ciencias nos puso de tarea dibujar “living things” y “non-living things”. Llegó mi turno de mostrar mi trabajo. La profesora revisó mi cuaderno y me dijo que esta era la última vez que dejaba que mis papás hicieran la tarea por mí. Las niñas del curso me defendieron (un acto de apoyo que poco se vería en años posteriores), y a ella no le quedó más remedio que creerme. Uno los ve ahora y es obvio que son rayones de una niñita de siete años, pero para mí fue bastante halagador que en su bilis la señora me tratara accidentalmente de geniecillo artístico.

Un comentario para “Nota al margen”

Opinar es bueno