Últimamente me ha resultado más fácil dibujar que escribir. No sé si lo que en realidad quiero decir es que dibujar me hace más feliz que escribir. Escribir siempre es doloroso y va y resulta un bodrio ahí que uno con gusto quemaría si no fuera porque esto es un blog y hacer clic en “move to trash” no tiene nada de mágico ni liberador. Un blog es como una bitácora de progreso en la que no hay mayor progreso. O al menos así lo es para mí. No sé cómo será para el autor publicado. De pronto es un repositorio de borradores. Ahora me acordé de ese ex novio que me dijo que yo no era más que una escritora de blog, y pues sí, es la verdad. Lo que significa que en realidad no soy escritora sino que ocupo el mismo lugar de los que arman rompecabezas o se dedican a la filatelia. Pero bueno, tampoco es tan grave. Cuento con la fortuna de tener más de una afición apasionante, y el ensimismamiento que me trae el dibujo me es en este momento mucho más grato que la lucha con/contra las palabras (que de todas maneras no puedo abandonar). Tal vez algún día llegue a ser una aficionada famosa como Bob Ross, aunque él pintaba árboles felices y yo dibujo Olavias malacarosas.
Eres más que una escriora de blog. Pero para dejarlo como sólo el blog, debo decir que de las pocas páginas de blogs que he podido aprender la ortografía es la tuya.
Quedo dichosa de saberlo. Gracias.
Me encantó esta frase “Lo que significa que en realidad no soy escritora sino que ocupo el mismo lugar de los que arman rompecabezas o se dedican a la filatelia.”
Esos que escriben blogs, arman rompecabezas y se dedican a la filatelia son héroes innombrables. Él único que ha logrado nombrarlos ha sido Georges Perec en “La vida instrucciones de uso”.
Mira que me prestaron ese libro hace tiempo y nada que lo leo. Tomaré tu comentario como una señal para empezarlo de una buena vez.